Descripción
Gestión eficaz del inventario de baja rotación y obsoleto (SLOB): Un pilar vital del control de inventarios
En el dinámico panorama del control de inventarios, es posible que su almacén ya albergue una serie de inventarios obsoletos y de baja rotación (SLOB). A medida que estos productos continúan languideciendo en sus existencias, su presencia supone una amenaza inminente para la vitalidad de su negocio. En el próximo artículo, usted explicará una estrategia integral para supervisar y gestionar con eficacia sus SLOB, garantizando la rentabilidad duradera de su cadena de suministro y la sostenibilidad de su negocio.
El término «lento» se emplea acertadamente para designar los bienes o productos que se caracterizan por un bajo índice de rotación dentro de una empresa. Por otro lado, «obsoleto» se refiere a bienes o productos que han caído en el olvido, ya sea debido a la falta de demanda o al cese de su producción por parte del proveedor.
El inventario de baja rotación representa uno de los aspectos más difíciles de la gestión de inventarios, ya que puede inmovilizar recursos y capital valiosos que, de otro modo, podrían emplearse con mayor eficacia. Identificar y gestionar estos artículos es crucial para mantener una cadena de suministro eficiente y rentable. En este artículo, exploramos los retos inherentes a la gestión del inventario de baja rotación y proponemos enfoques estratégicos para mitigar estos obstáculos, mejorando así las operaciones empresariales en general.
Tabla de contenidos
- Asegurar-una-Cadena-de-Suministro-rentable
- Descubrir los matices de las existencias obsoletas y de baja rotación (SLOB)
- Navegar en el reino del inventario obsoleto
- Gestionar eficazmente las existencias lentas
- Implantar el KPI SLOB en su negocio
- Cómo hacer números: Cálculo del inventario obsoleto
- Calcular el inventario lento
Asegurar una cadena de suministro rentable
Si aspira a fortificar la rentabilidad de su cadena de suministro y, por extensión, de todo su negocio, su enfoque debe converger en una trinidad de pilares fundacionales: servicio, costes y liquidez de inventario. Hoy, sin embargo, nuestro escrutinio será especialmente agudo, centrándonos en el ámbito del inventario de baja rotación (SLOB) y su anticuado homólogo, el stock obsoleto.
Para empezar, la gestión eficaz de las existencias de rotación lenta y obsoletas (SLOB) requiere un enfoque proactivo y estratégico que aborde tanto los síntomas como las causas profundas del estancamiento de las existencias. El primer paso en este proceso es la identificación precisa y la revisión periódica del estado del inventario. Esto implica segmentar el inventario para determinar qué artículos se mueven lentamente debido a la demanda cíclica frente a los que están realmente obsoletos. Las herramientas avanzadas de análisis predictivo y previsión de inventario pueden ayudar significativamente en esta tarea, permitiendo a las empresas predecir mejor los patrones de demanda y ajustar los niveles de inventario en consecuencia. Estas herramientas también ayudan a identificar posibles artículos de baja rotación antes de que se conviertan en una carga financiera.
A continuación, una estrategia eficaz para minimizar el inventario SLOB es la implantación de un sólido sistema de optimización del inventario. Esto incluye revisar las prácticas de aprovisionamiento, aumentar la precisión de la previsión de la demanda y mejorar la agilidad de la cadena de suministro. Por ejemplo, la adopción de un sistema de inventario Justo a Tiempo (JIT) puede reducir los costes de mantenimiento de inventario y aumentar los índices de rotación de inventario al alinear más estrechamente las entregas de inventario con los programas de producción. Además, renegociar los contratos con los proveedores para permitir cantidades de pedidos y políticas de devolución más flexibles también puede aliviar el riesgo de acumular un exceso de existencias. Por otra parte, la colaboración y comunicación regulares con proveedores, clientes y partes interesadas internas son cruciales para sincronizar las operaciones de la cadena de suministro y optimizar el flujo de inventario.
Además, para el inventario que inevitablemente se queda obsoleto o sigue siendo de baja rotación, hay que emplear estrategias de liquidación creativas y eficaces. Esto puede implicar descontar productos para venderlos rápidamente, agruparlos con artículos más populares o venderlos a liquidadores o a través de mercados alternativos como tiendas outlet o mercados en línea. Reciclar o reutilizar partes del inventario para otros productos o usos dentro de la empresa también puede ser una forma rentable de gestionar el inventario SLOB. Estas estrategias no solo ayudan a recuperar el valor de las existencias de baja rotación, sino que también liberan valioso espacio y recursos de almacén, mejorando así la eficiencia y la rentabilidad general de la cadena de suministro.
Desvelando los matices del Inventario de Movimiento Lento y Obsoleto (SLOB)
Emprendamos nuestra exploración desentrañando una cuestión fundamental: ¿qué delimita la demarcación del inventario de baja rotación del reino de las existencias obsoletas?
Las existencias de rotación lenta se componen de artículos cuya velocidad de venta es menor y que, por tanto, permanecen en stock más tiempo que otros productos. Estos artículos pueden variar mucho en función del sector, la demanda del mercado y los factores estacionales. El primer reto en la gestión del inventario de baja rotación es identificar con precisión qué productos entran en esta categoría. Esto requiere un sistema robusto para rastrear y analizar las ventas a lo largo del tiempo, yuxtapuestas con los niveles de inventario, para identificar con precisión los productos que constantemente rinden menos.
Navegar por el reino de las existencias obsoletas
El stock obsoleto proyecta su sombra sobre productos que han caído en desuso, han caducado o se han convertido en reliquias de épocas pasadas. Se trata de artículos que deben eliminarse, venderse con grandes descuentos o incluso regalarse, ya que han sobrepasado el límite de lo vendible. El impacto del inventario obsoleto en la salud financiera de una empresa es profundo, ya que inexorablemente pierde el 100% o más de su valor, teniendo en cuenta los costes asociados a su eliminación.
El principal problema que plantean las existencias de baja rotación es la presión financiera que ejercen sobre la empresa. El capital inmovilizado en bienes no vendidos es capital que no se puede reinvertir en otras áreas potencialmente más rentables. Además, los artículos de baja rotación ocupan un valioso espacio en el almacén, contribuyen a elevar los costes de almacenamiento y, con el tiempo, pueden quedar obsoletos, dando lugar a amortizaciones que repercuten en la salud financiera de la empresa.
Gestión eficaz de las existencias de rotación lenta
El inventario de lento movimiento, coloquialmente conocido como exceso de existencias, inventario envejecido o inventario residual, representa productos que, si bien no están obsoletos ni provienen de antaño, merodean en exceso. La presencia de un exceso de inventario genera costes adicionales, ya sea por los gastos de almacenamiento o por la necesidad inminente de eliminar el excedente para dar cabida a nuevas colecciones.
Sin embargo, el exceso de inventario no equivale necesariamente a obsolescencia.
Para aclarar este laberíntico panorama del inventario y decir adiós tanto al inventario de baja rotación como al obsoleto, una herramienta fundamental a su disposición es el cálculo de la rotación del inventario. Encontrará información muy valiosa sobre este tema en mis artículos sobre ‘Cálculo de la cantidad económica de pedido (EOQ)’ y ‘Fórmula y cálculo del stock de seguridad: 6 mejores métodos’.
La gestión eficaz de las existencias de rotación lenta depende en gran medida de la precisión de los datos de inventario y de sofisticadas técnicas de previsión. Un reto común es la falta de sistemas precisos de seguimiento de inventarios que puedan actualizarse en tiempo real y proporcionar información procesable. Sin datos precisos, las previsiones se convierten en conjeturas, lo que complica los esfuerzos para alinear los niveles de inventario con la demanda del mercado. Los análisis predictivos avanzados pueden ayudar a solucionar este problema proporcionando previsiones de demanda más precisas e identificando los posibles productos lentos antes de que se acumulen.
Implantación del KPI SLOB en su empresa
Su viaje hacia la gestión eficiente del SLOB comienza con la descarga inmediata de mi plantilla gratuita de Excel, meticulosamente diseñada para facilitar el cálculo acelerado del Indicador Clave de Rendimiento (KPI) del SLOB.
Otro reto importante es la rigidez de las operaciones de aprovisionamiento y de la cadena de suministro. Los sistemas tradicionales de pedidos pueden crear situaciones en las que las empresas compran artículos en exceso debido a los incentivos de compra al por mayor o a las cantidades mínimas de pedido impuestas por los proveedores. Esta práctica suele agravar el problema de la lentitud de las existencias. Las estrategias de aprovisionamiento flexibles, como los sistemas de inventario Justo a Tiempo (JIT), pueden ayudar a reducir la incidencia del exceso de existencias al ajustar más las compras a la demanda real.
Cómo hacer números: Cálculo del inventario obsoleto
El viaje para cuantificar el inventario obsoleto comienza con un proceso de dos pasos:
Paso 1: delimitar claramente los productos que constituyen su inventario activo de los relegados a la obsolescencia. Este paso fundamental puede ejecutarse manualmente o confiarse a las proezas de automatización de Excel mediante el establecimiento de los parámetros de fecha pertinentes. En industrias como la alimentaria o la farmacéutica, los productos están intrínsecamente ligados a fechas específicas, que sirven como árbitros de su estado: activo u obsoleto. Utilizando la capacidad de cálculo de Excel, con la fecha de hoy como punto de referencia y la inclusión de las fechas de inicio y fin de cada producto, se puede diferenciar rápidamente entre lo nuevo y lo obsoleto. Cualquier producto que quede fuera de los parámetros de fecha definidos se marca inequívocamente como «obsoleto».
Paso 2: Calcule el valor de su inventario obsoleto. La columna F, que contiene el valor de su inventario, sirve de base para el cálculo del valor de las existencias obsoletas. Esta tarea matemática puede realizarse manualmente, resaltando cada línea de existencias obsoletas y dividiendo su valor por el coste total del inventario. Alternativamente, se puede recurrir a una tabla dinámica para agilizar este proceso.
Cuantificación del inventario de lento movimiento
El camino para calcular el inventario de lento movimiento comienza con el cálculo de la rotación de inventario, denotada como Rotación de existencias. El objetivo es determinar la rotación de existencias de cada producto, que se obtiene dividiendo el valor de las existencias por las ventas y multiplicándolo por el período correspondiente.
Una vez aplicada la fórmula, que hace palpables los resultados, nos enfrentamos a la tarea de establecer prioridades. Es imperativo discernir qué productos merecen su atención inicial. En particular, los productos clasificados como lentos no son intrínsecamente obsoletos. Para afinar aún más este umbral, tiene la posibilidad de alinearlo con la rotación general de existencias, el plazo medio de entrega, los puntos de pedido y los niveles de existencias de seguridad.
De hecho, la calibración de este umbral debe adaptarse meticulosamente para armonizarlo con la idiosincrasia de su empresa. Este esfuerzo resultará inestimable para delinear una estrategia sólida de gestión del exceso de existencias.
La gestión del inventario de baja rotación es una parte intrincada de la gestión de la cadena de suministro que requiere atención y adaptación continuas. Mediante la implantación de sistemas avanzados de gestión de inventarios, el perfeccionamiento de las técnicas de previsión y la adopción de políticas de aprovisionamiento flexibles, las empresas pueden mitigar considerablemente los problemas que plantean los artículos de baja rotación. Además, los enfoques innovadores para la recomercialización o la eliminación responsable de los artículos de baja rotación pueden transformar los pasivos potenciales en activos, sosteniendo así el crecimiento y la rentabilidad de la empresa en el competitivo panorama del mercado.
En resumen, aunque el inventario de baja rotación siempre será un reto para los gestores de inventario, también presenta oportunidades para mejorar la eficiencia operativa y la toma de decisiones estratégicas.
Cálculo del inventario obsoleto y de lento movimiento (SLOB)
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Paso 1: Defina los productos activos y obsoletos
Identifique qué productos forman parte de su inventario activo y cuáles se consideran obsoletos. Este proceso puede realizarse manualmente o automatizarse en Excel estableciendo las fechas de inicio y fin de los productos con la fecha de hoy. Los productos dentro de la fecha se etiquetan como ‘Nuevos’, mientras que los que superan estas fechas se marcan como ‘Obsoletos’.
Paso 2: Calcular el valor del inventario obsoleto
En la hoja de Excel, incluya una columna que refleje el valor de su inventario. Para calcular el valor de las existencias obsoletas, resalte todas las entradas marcadas como obsoletas y sume su valor total. Este proceso de cálculo puede agilizarse utilizando una tabla dinámica. El seguimiento del coste total de las existencias obsoletas como porcentaje del inventario total es crucial. El seguimiento semanal de este indicador clave de rendimiento (KPI) es esencial, y la aplicación de estrategias como las promociones pueden ayudar a reducir el nivel de existencias obsoletas (SLOB).
Cálculo del inventario lento
Para determinar el inventario de lento movimiento, comience con la Rotación de Inventario, que implica dividir el valor de las existencias por las ventas, y luego multiplicar por el número de días. Establezca umbrales basados en las necesidades de su empresa, como aumentar el límite de rotación de existencias a XX días para identificar más productos de baja rotación, basándose en una rotación general de YY días.
Ajuste estos umbrales en función de varias familias de productos o criterios empresariales como el plazo medio de entrega, el punto de pedido y los niveles de stock de seguridad. Esto ayuda a gestionar el inventario de forma más eficaz, atendiendo a diferentes dinámicas de producto.